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lunes, 31 de mayo de 2010

Alfonso del Castillo


Inauguramos esta nueva sección de la peña relacionado con la historia del Betis, hablando del día y la persona que han hecho posible que nuestra historia, la historia del Betis exista como tal. Nos referimos al día en que empezó nuestro Betis y a la persona que lo inició: El 12 de Septiembre de 1907 y D. Alfonso del Castillo Ochoa.

No hay documentación exacta de cómo fue el inicio o si la hubo se ha perdido con el tiempo, y casi todo lo que se sabe suele ser por información oral. Yo me imagino una escena muy sevillana:

Sitúese el lector en el 12 de Septiembre de 1907. En un bar, de un barrio cualquiera, posiblemente en el centro de Sevilla cerca de la C/ Cervantes nº 15, donde estudiaba D. Alfonso junto con muchos de los primeros componentes de la primera plantilla de nuestro Betis o bien cerca de la casa del padre de D. Alfonso C/ Alfonso XII, nº 29 (primera sede social del Betis).

Imagínese el lector a un grupo de jóvenes, muchos de ellos de la misma familia: Del Castillo Ochoa (Alfonso y Juan), Wesolowsky (Jacinto, Edmundo, Guillermo y Pepe), Hermosa (Luís, Pepe, Andrés y Pedro) o Gutiérrez Fernández (José, Manuel y Antonio). Todos ellos practicantes y amantes de ese deporte que los ingleses que trabajaban en las minas de rio tinto, cuyos barcos atracaban en el Guadalquivir, estaban importando. Estos se encuentran tomando unas cervezas (una cruzcampo? creada en 1904) o unos vinos después de clase o de jugar un partido.

Oye, ¿y si formalizamos estos partidos que jugamos de vez en cuando?

Estaría bien, podríamos formar un equipo entre todos

Así podríamos jugar torneos” (el primero jugado por el Sevilla Balompié fue en Huelva, en 1908)

Pero nada de poner foot-ball en el nombre, mejor algo sólo en español

¿Y si lo llamamos España Balompié? todo español” (a los pocos meses decidieron cambiarlo para que el equipo llevará el nombre de la ciudad y le llamaron Sevilla Balompié)

Del escudo me puedo encargar yo” (comentó Juan del Castillo Ochoa, que diseño un primer escudo circular con el nombre en el interior y los colores rojigulda de fondo. Al cambiar el nombre a Sevilla Balompié el fondo pasó a ser entero azul)

Habrá que establecer una cuota. Y el que no pague, no juega, eh?” (en un principio la cuota fue de un real semanal para los gastos)

Nosotros proponemos que la sede sea en mi casa, allí podríamos guardar todo lo que nos haga falta para jugar los partidos y los papeles del equipo” (hablaban Alfonso y Juan del Castillo Ochoa, primer y segundo presidente de nuestro Betis)

D. Alfonso fue elegido primer presidente por el resto de sus amigos y compañeros, y estuvo durante dos años en el cargo (1907-1909). Y como el resto de la “directiva” de aquel primer equipo D. Alfonso, además de presidente era jugador.

Así es como me imagino que D. Alfonso y sus amigos crearon lo que para ellos fue un equipo de futbol de amigos para pasar el tiempo ahora es algo más que un simple equipo de fútbol profesional, es un SENTIMIENTO.

Y sobre nuestro primer presidente, ¿qué podemos decir sobre él? ¿Qué conocemos?

D. Alfonso nació a finales del siglo XIX. Mientras que ejercía de presidente acabó de estudiar y consiguió el título de Facultativo de Minas. El padre, era militar y como tal se movía de forma habitual en función del destino asignado. Por ello, aún siendo joven y con el Sevilla Balompié ya creado, la familia de D. Alfonso tiene que abandonar Sevilla y desplazarse a Cartagena. Allí conoce y se enamora de Dª Caridad Martínez Delgado, hija de Enrique Martínez Muñoz, que fue el cofundador de las primeras escuelas graduadas de España, instaladas en Cartagena. Y a pesar de que su familia vuelve a Sevilla, él, por amor, se queda en Cartagena para casarse con Dª Caridad y ejercer de abogado (con el tiempo sería muy afamado en Cartagena).

Del matrimonio entre D. Alfonso y Dª Caridad nacen 8 hijos, 2 hombres (Alfonso y Enrique) y 6 mujeres (Rocío, Carmen, Mª Luisa, Pilar, Nani y Mími) que le dan a su vez a nuestro primer presidente un gran número de nietos (dos de ellos, Emilio Cerezuela Del Castillo y Juan Calero del Castillo, muy implicados con el Betis y mucho más tras el centenario).

D. Alfonso recibió con motivo de las bodas de oro de nuestro Betis, una medalla conmemorativa por su gran labor en la fundación del equipo. Esta medalla la guarda en la actualidad una de sus hijas, incluso en la misma caja y con el mismo algodón con el que se la dieron a su padre.

Cuentan sus nietos que, a pesar de ser sevillano, era un hombre de pocas palabras. Pero no dejaba pasar ninguna oportunidad para hablar de fútbol y por supuesto, no faltaba su Betis de fondo. Y siempre decía del Betis que era “El Real Equipo de Sevilla” y que el Sevilla era otra cosa, que el Betis se llevaba en el corazón.

Pasó sus últimos días en Cartagena viviendo en la C/Palas. Y allí en Cartagena se encuentra enterrado.

Quiero acabar esté primer post, animando a todos los béticos a que no olviden la historia de nuestro equipo. Que recuerden, que allá donde empezó un grupo de amigos ahora existe un SENTIMIENTO, y como tal se debe cuidar día a día. Hay que estar ORGULLOSOS de ser Béticos, pase lo que pase.

Abrazos béticos

Miguel A.



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